Marcela Kraemer, el primer saludo del día
La inspectora general cumple 37 años en la institución y encabeza un equipo de 11 personas que se preocupa de cada detalle en todos los rincones del colegio.
La primera persona que aparece por la puerta de ingreso de calle Bustos y que saluda a cada niño y niña que entra al colegio es Marcela Kraemer. La inspectora general del TEI es de las que llega todos los días a las 7 de la mañana, revisa la planificación en detalle, libros, horarios de profesores, y a las 7.45 se ubica para realizar el ritual que se ha impuesto por años.
“Por la puerta de Bustos es por donde entran principalmente los niños de primero básico y me gusta conocerlos. Yo soy abuela y los acojo como tal. Si alguno está llorando, puedo acercarme a ayudar a los papás y mamás. A cada niño que entra lo saludo: Good Moning. Todos los días, me saluden o no me saluden, por si van apurados o por si son tímidos. Si son 80 niños, a los 80 los saludo. Y aprenden, porque al final de año todos me saludan.”, cuenta.
Miss Marcela llegó en 1987, al Carmen Mc Phee, recién salida de pedagogía en la Universidad Católica. Justamente su primera experiencia fue entrevistarse con la fundadora del colegio.
-¿Cómo fue esa entrevista?
-La verdad es que no tenía idea con quién iba a hablar. Pero conversamos de todo y nos caímos estupendo. En marzo ya estaba como profesora de segundo básico. Miss Carmen era un personaje. Era muy especial, muy adelantada a sus tiempos. Creo que este fue el primer colegio inclusivo en Chile, porque Miss Carmen no hacía selección. Había niñoa con capaciudades diferentes y ella no ponía límites, aunque en esos tiempos nosotros éramos profesores sin ninguna especialidad, pero nos enseñaba a sacar a estos estudiantes adelante. Me acuerdo haberle hecho clases a la Maureen, que era sordomuda y quien hoy es una profesional exitosa. Miss Carmen era muy proactiva, creativa. Una vez, para el día del estudiante, ella se mandó a hacer un uniforme del colegio y apareció vestida con él en acto cívico. Lo sabía todo y para mí siempre ha sido un modelo a seguir.
Desde entonces, Miss Marcela ha vivido una larga historia de cambios hasta instalarse al mando de 11 personas que forman el equipo de inspectoría.
“Partí como profesora de segundo básico, pero al poco tiempo me llamó Peter Mc Phee para ver si podía hacer un remplazo como profesora de historia de quinto y sexto básico. Pensé que sería por un tiempo, pero al final me quedé ahí por años. Cuando vino la fusión de los colegios y en 2004 nos convertimos en The English Institute, no sabía cómo iba a continuar, pero me ubicaron como inspectora de quinto y sexto básico”, recuerda.
-¿Cómo fue el cambio de pasar de profesora a inspectora?
-Primero, llegué a este colegio distinto. Pero hubo una inspectora que a una amiga y a mí, que veníamos del Carmen, nos adoptó, nos enseñó todo: Miss Encarnación Izquierdo. Yo no sabía ni cómo revisar un libro de clases. No me relacionaba dando órdenes, me relacionaba en clases, en un curso chiquitito. Porque el Carmen era como una gran familia, y aquí todo era más grande. Yo estaba en el edificio que está al lado de cancha roja, donde se ubicaban los quintos y los sextos, entonces me subía al segundo piso, en el balcón, donde había una baranda de metal, y ahí usaba un anillo grueso que tenía. Lo golpeaba y así hacía callar a los estudiantes y los formaba y a viva voz. En vez de una campana, usaba el anillo.
En 2012, Miss Marcela se hizo cargo del departamento de Convivencia. Su tarea duró hasta 2017, cuando fue nombrada en su cargo actual como inspectora general. Mientras lo describe, una radio manual suena a su lado en cualquier momento. Es el vínculo permanente con los integrantes de un equipo que recorre todos los espacios del colegio.
“Somos un equipo de 12 personas. Es un grupo que hace mucho, que mueve el colegio, porque trabaja con niños, apoderados y profesores. Es el que más sabe de todo lo que pasa. Cada detalle. Y no solo en la parte disciplinaria, porque son muy consejeros de los niños también. Está dividido por inspectores de nivel y de apoyo, que son inspectores de patio. Funciona muy bien, en personalidad es bastante heterogéneo y eso es bueno, hay diversidad, pero con objetivos comunes. Tenemos mucha confianza y diría que incluso somos como amigos. Estamos en patios, salas, oficina., siempre muy atentos a la radio.
-A parte del saludo en la mañana, ¿qué es lo que más disfruta del colegio hoy?
-Yo tengo un lado lúdico, siempre fui media loca, medio artista. En el Carmen me dejaban ser yo completamente y organizaba la fiesta del colegio, un montón de actividades, tanto para profesores como estudiantes. Hacía que los profesores participaran y que nos disfrazáramos. Por eso, la semana del colegio, el día del estudiante, la British Week, son lo que más me gusta. Es la semana en que los inspectores tienen más trabajo, porque hay más desorden, menos estructura, niños más libres, pero me igual me encanta.